sábado, 5 de enero de 2008


Propósito


Pago por oír

los latidos de tu corazón

cuando me ves.

Convoco a Don Alí Babá

y sus cuarenta camaradas

para que me ayuden a robarte

un segundo de tu ternura.

Rayo el cielo,

apago el infierno

brinco las trincheras de lo humano

para dar los pasos

que me lleven verdaderamente a ti.

Voy a tejer con amor

cada una de las palabras que brotan de tu boca

para hacerme un vestido

que cubra todo mi cuerpo.

Beberé el agua bendita

que reposa en el cántaro de Raquel

para santificar mi boca y mis besos.

Voy a dejar de sobrevivir,

quiero vivir…

por eso te necesito ahora y aquí.

¡La madre que sí¡